lunes, 16 de enero de 2012

PSICOLOGÍA: "Violeta, Bombal y las otras", por Liberty Valance. El Mercurio, 14 de enero de 2012.

Estimados señores:
Mail Order Chilean Brides (Novias Chilenas por Correo), uno de los capítulos de nuestra organización, se fundó en Miami en 1987 y aún mantiene su sede en Coconut Boulevard 091-B.
La empresa está a punto de adoptar una drástica decisión que nos afecta como institución, aunque en realidad debería afligir a Chile y especialmente a la imagen internacional de la mujer chilena.
Este es el motivo de nuestra carta.
Según nuestra experiencia, los estadounidenses nunca han preferido a las chilenas sobre las caribeñas o brasileñas, por ejemplo, pero las peticiones, aunque escasas, no faltaron, porque siempre aparecía un granjero de Kansas o un mecánico de Detroit, que pedía información de chilenas y soñaba con una novia de esa nacionalidad.
Vaya a saber uno por qué, pero así era. Y por lo general ciudadanos de tierra adentro, de nivel cultural bajo y carácter acampado, como se dice por acá.
En los últimos meses, sin embargo, ni siquiera ese tipo de gente nos escribe.
Se siguen pidiendo novias peruanas, colombianas, argentinas o ecuatorianas, pero nadie quiere a las chilenas.
¿Qué es lo que ven en YouTube o leen en las redes sociales los estadounidenses?
¿Qué es lo que ven en la televisión o bajan de internet?
No una película, sino tres consecutivas y no un mensaje idéntico: la mujer chilena torbellino, que es un tormento para el marido y la familia.
Creemos que Teresa (2009), Violeta que estás en los cielos (2010) y Bombal (2011), están perjudicando la imagen de la mujer chilena.
Entendemos que el contexto histórico fue determinante, pero eso pasó a la historia y lo que ahora se ve en esas películas es que las señoras Teresa Wilms Montt, María Luisa Bombal y Violeta Parra, aunque de clases sociales y talentos distintos, eran intranquilas, poco sociables, llevadas de sus ideas y con tendencia a la depresión.
A esos modelos de mujeres nadie las querría tener de novia y menos pensar en casarse, por neuróticas, violentas y cascarrabias.
Se trata de modelos femeninos discontinuados para el noviazgo y el matrimonio, que es nuestro nicho de negocios en Estados Unidos.
Nosotros entendemos que son películas de ficción, pero el gringo medio no lo ve así y tienen un punto: son chilenas famosas que existieron en la realidad y a lo mejor crearon escuela.
Las preguntas surgen solas: ¿No hay otras mujeres históricas o esas son las únicas que hay? ¿Son todas las chilenas así? ¿La mujer actual, mantiene esos rasgos y características, tan marcados?
Es decir: celosas sin motivo, inseguras hasta de su sombra, quisquillosas siempre, insatisfechas consuetudinarias, majaderas hasta decir basta, aportilladoras incansables, rezongonas sin razón, amargas por naturaleza, discutidoras por deporte y con un estado de ánimo en permanente oscilación.
Ante el peso de los hechos, la sombra de la duda y la falta de demanda, damos por cerrado el capítulo Mail Order Chilean Brides de nuestra organización.
Atentamente
The Mail Order Latin Brides Inc.
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por Liberty Valance.

domingo, 8 de enero de 2012

CINE: "La vida de los peces" de Marías Bize.

Anoche vimos esta película, que nos habían recomendado mucho.
La historia completa transcurre al interior de una casa, durante una fiesta de cumpleaños. Andrés, amigo entrañable del festejado, llega de paso, luego de vivir y trabajar por años en Berlín. Con añoranzas, buenos y malos recuerdos, y un amor que flota en el aire y que nunca logró concretarse, pasea él por los diferentes ambientes de la gran casa, encontrándose con personas a las que no veía hacía años. Se da cuenta de que la vida de los seres humanos sigue su curso, igual que la suya, a veces paralelo pero sin tocarse, como los peces; que se ha perdido gran parte de esas vidas, y que ha desechado oportunidades que al parecer no volverán. Encuentra a "Bea", su gran amor, a quien alguna vez dejó esperando en un café. Ella ya formó una familia, junto a un gringo que todo se lo perdona, y con quien tuvo un par de mellizas. Su rostro desde un principio muestra tristeza, insatisfacción, y temor de enfrentar a Andrés, a quien sigue amando.
Es una película de ambigüedades, incluido su final. Una película muy bien filmada, con coloridos que asemejan el interior de una pecera, con luces de colores a través de las cuales se nos muestran -siempre en parte- sus personajes.
No la recomendaría, porque aunque me parece artística y muy bien actuada por Blanca Lewin, su protagonista, la encuentro extremadamente ambigua, lo que muchas veces consiste en un recurso para hacer parecer interesante un guión demasiado simple.